Mailänderli y hoy más que nunca, cosas de la vida, recetas y amores
Unas galletas de navidad típicas suizas, con denominación italiana, aprendidas de una argentina y horneadas por una española en suelo austriaco... dime tú que cuerpo diplomático es capaz de formalizar la tarjeta de visita de estas galletas... porque el horno no entiende de aduanas, ni de fronteras ni de permisos de residencia ni nada de ese palo. Las cosas del comer, se saltan a la torera las normativas internacionales y pueden hacer llorar de nostalgia al expatriado, soñar al que nunca viajó y saciar de gusto al glotón que no entiende de matices... "oiga usted, y estas galletas de dónde son?" "pues no lo ve?! son de este menda lerenda que en cuanto usted deje de hacer preguntas absurdas, se va a zampar las galletas a dos manos... y luego, si usted lo estima oportuno, pregunte a mi píloro a ver que le cuenta"...
Pero desde que tengo blog, las cosas no son tan sencillas. Las recetas ya no son un preámbulo a un atracón de placer gástrico. Las recetas tienen historias detrás, más allá de la procedencia de un dulce o una salsa. Contienen lazos invisibles de muchos sentimientos. Llamadas a media tarde desde el supermercado contando que el chorreante de chocolate va a entrar en el horno. Más llamadas, porque el chorrenate salió con una pinta tremenda y será el postre de un gigantesco pavo de acción de gracias. Este año, relleno de chorizo criollo y calabaza... uhmmm, y yo tan lejos! Chicas, mandarme fotos, no os olvidéis:-)
Otras veces, esos lazos los ato yo misma, fruto de mis pasiones inconfesables -o no- por otros blogs, otras manos que amasan, hornean, degustan y comparten. Amistades invisibles aún, donde nuestra única prueba de vida real es una webcam y esas panorámicas desenfocadas que nos hacemos a lo "mira, mi cocina" "aquí amaso" "desde aquí te escribo" "mi terraza" "mis..." mis destellos de cariño a una nueva forma de entender la amistad.
Y como ya sabes, ando haciendo kilos y kilos de galletas. Este año los encargos se han dado muy bien y mi horno no da para otra cosa. En este sin parar, se me ha echado encima el adviento. El primer domingo de adviento del mes de noviembre más soleado que ha tenido Austria desde que le da por apuntar este tipo de cosas... más de cien años, parece, que al primero que se le ocurrió ir dejando las cosas del tiempo por escrito fue en 1910 creo recordar... mucho frío y mucho sol. Una combinación que sabe muy rica, la verdad. Mucha luz, mucho oxígeno concentrado en el aire y ese olor a escarcha... y mi horno echando fuego!
Tanto que no tuve tiempo de hornear unas galletas especiales para el Kranz, la corona decorada con 4 velas, que iremos encendiendo cada domingo una a una hasta llegar la navidad. La costumbre es que, cada tarde de domingo, a la que se va el sol, se enciende el Kranz, se sirve una bebida caliente y se acompaña con unas galleticas surtidas. Hoy no tengo ninguna. Las he entregado todas y las pocas que sobraron los chicos se las zamparon ayer. Y media docena de estrillitas que aparté para decorar el centro de velas, menos mal... en cualquier caso, ya puedo correr si quiero seguir con la tradición...
Estas galletas son -como no- de la Majuluta. Son las clásicas Mailänderli suizas. Muy sencillas y geniales para hacer un surtido. Este año las he rellenado con nutela y con crema de almendras además de decorar cada surtido con una variedad de formas y decoraciones. Me gusta mucho decorarlas con glasas de colores. Usa una cucharada de mermelada tipo gelee-sin trozos- y la mezclas con 3 ó 4 de azúcar glas -tiene que quedar bien espesa porque sino no se secará-. Así, tendrás sabor y color sin usar colorantes.
Ingredientes:
Preparación:
Bate la mantequilla con el azúcar, hasta que quede una crema suave. Añade el ron, la ralladura de limón y el huevo. Bátelo un poco antes de echarlo y separa un poco para usarlo después para pincelar las galletas. Incorpora las harinas previamente mezcladas y tamizadas con una pizca de sal. En este caso no debes amasar. Trabaja la masa como si fuera una quebrada. Lo que se trata es que estas masas queden algo rústicas, sin homogeneizar mucho la masa y sin amasarlas mucho para evitar que el gluten de la harina se desarrolle demasiado. Así que la trabajas con las manos sin mucha ciencia. Más fácil, imposible.
Envuelve la masa en un film de cocina y deja que repose en el frigorífico una hora más o menos . Siempre que dejes una masa descansar, va a ser más fácil trabajarla y en el caso de las galletas, te aseguro que una masa que no se deje extender bien te puede amargar la tarde. Así que no corras y deja que descanse. Además, darás tiempo para que los sabores y aromas se desarrollen. Ahora, precalienta el horno a 180ºC. Estira la masa sobre la encimera ligeramente enharinada. No te pases echando harina que luego las galletas pueden cogerte mucho sabor harinoso. El espesor, el que tu quieras. Para rellenar, más finitas y para lucir solas, más gordicas. De todas formas salen ricas, eso es lo bueno. Corta las galletas con las formas deseadas y pásalas a la bandeja de hornear con un papel de horno encima. E huevo batido que hemos guardado, lo mezclamos con una cucharada de leche. Pinta la superficie de cada galleta antes de meter al horno. Si vas a hacer mucha cantidad de hornadas, baja el horno a 170ºC después de la 2ª ó 3ª tanda.
Y yo ahora, me voy pitando a seguir horneando. Pero esta tarde, apagaré el fuego, me sentaré tranquila con los chicos y encenderé mi candela.... y tú, enciende la tuya y desea con fuerza que lo malo haya pasado ya, que regrese la tranquilidad y aunque esas heridas de la vida nunca se cierran, que la paz vuelva a entrar en tu casa y ya no salga nunca. No digo más. Que la magia de la vida haga el resto:-)
[aquí, falta una foto, la que subiré esta tarde cuando encienda la primera]... volveré.
Mira, dos. Te debía una pero te dejo con dos fotos de esta bonita luz:-) besos
Y regreso para enseñarte esta otra. Es de la Ventolera, con quién enciendo velas desde hace tiempo pero es la primera vez que nuestros reflejos quedan grabados en el cristal.. y ahora dime tú, si el mundo no hace magia:-)
- 125 gr. mantequilla reblandecida
- 100 gr. azúcar
- 1 cdta. ron
- ralladura de limón
- 1 huevo grande batido (1/2 se reserva para pincelar)
- 200 gr. harina
- 50 gr. maicena
- pizca de sal
Preparación:
Bate la mantequilla con el azúcar, hasta que quede una crema suave. Añade el ron, la ralladura de limón y el huevo. Bátelo un poco antes de echarlo y separa un poco para usarlo después para pincelar las galletas. Incorpora las harinas previamente mezcladas y tamizadas con una pizca de sal. En este caso no debes amasar. Trabaja la masa como si fuera una quebrada. Lo que se trata es que estas masas queden algo rústicas, sin homogeneizar mucho la masa y sin amasarlas mucho para evitar que el gluten de la harina se desarrolle demasiado. Así que la trabajas con las manos sin mucha ciencia. Más fácil, imposible.
Envuelve la masa en un film de cocina y deja que repose en el frigorífico una hora más o menos . Siempre que dejes una masa descansar, va a ser más fácil trabajarla y en el caso de las galletas, te aseguro que una masa que no se deje extender bien te puede amargar la tarde. Así que no corras y deja que descanse. Además, darás tiempo para que los sabores y aromas se desarrollen. Ahora, precalienta el horno a 180ºC. Estira la masa sobre la encimera ligeramente enharinada. No te pases echando harina que luego las galletas pueden cogerte mucho sabor harinoso. El espesor, el que tu quieras. Para rellenar, más finitas y para lucir solas, más gordicas. De todas formas salen ricas, eso es lo bueno. Corta las galletas con las formas deseadas y pásalas a la bandeja de hornear con un papel de horno encima. E huevo batido que hemos guardado, lo mezclamos con una cucharada de leche. Pinta la superficie de cada galleta antes de meter al horno. Si vas a hacer mucha cantidad de hornadas, baja el horno a 170ºC después de la 2ª ó 3ª tanda.
Y yo ahora, me voy pitando a seguir horneando. Pero esta tarde, apagaré el fuego, me sentaré tranquila con los chicos y encenderé mi candela.... y tú, enciende la tuya y desea con fuerza que lo malo haya pasado ya, que regrese la tranquilidad y aunque esas heridas de la vida nunca se cierran, que la paz vuelva a entrar en tu casa y ya no salga nunca. No digo más. Que la magia de la vida haga el resto:-)
[aquí, falta una foto, la que subiré esta tarde cuando encienda la primera]... volveré.
Y regreso para enseñarte esta otra. Es de la Ventolera, con quién enciendo velas desde hace tiempo pero es la primera vez que nuestros reflejos quedan grabados en el cristal.. y ahora dime tú, si el mundo no hace magia:-)
Me apunto a lo de encender la vela sin duda. Me parece una tradición preciosa y sana para el alma. Besos.
ResponderEliminarPreciosa entrada mai. Yo sé mucho de esas tarjetas de visita que ningun cuerpo diplomatico es capaz de formalizar y de esas cosas del comer y del vivir que hacen llorar de nostalgia al expatriado. Cambiemos de tema que sino me da la llorera.... dejame que te felicite por esas mailanderli que te han quedado divinas de la muerte y que merecen, hoy mas que nunca un besote soleado, que aqui también estamos en adviento fuera de normas meteorologicas, y no veas que gustito da . Me dejas, como a todas con las ganas de volver a leerte , pasaré a ver esa velita magica. Un besote
ResponderEliminarMe apunto la idea de la glasa de color sin colorantes, Mai, me parece muy especial.
ResponderEliminarLas galletas se ven divinas, sean de donde sean, no hay más bonito que las mezclas.
Un beso, guapa, aqui justamente este fin de semana ha llegado el frío y la niebla, pero es que ya iba tocando.
Besos.
Hola Pilar!
ResponderEliminarMucho:-) un fuerte abrazo,
Besos
Hola Eva!
Cómo estás reguapa?! ains, ains. Así son las cosas, verdad? cojo ese besote y esa felicitación con mucho pero que mucho gusto. Un achuchón de los gordos:-)
Besos
Hola Marhya!
Verdad que sí? y de verdad que lo son, unas galletas que invitan al recogimiento y a pasar la tarde agustico en casa... y con frío y niebla? pues mejor que mejor:-)un abrazo enorme, querida mía!
Besos
Maite
ResponderEliminarQue bonitas galletas.
Como he disfrutado leyendo tu entrada, es verdad todo lo que dices, cosas de la vida, recetas y amores, que ingredientes mas estupendos¡¡
Haré las galletas con un agujerito para colgar en el arbol.
Encenderé la vela me encanta
Gracias¡¡ por hacerme disfrutar
besitos
Patricia
Que tal Mai?' veo que tu horno tiene una actividad tan frenetica que lo vas a acabar estresando. Las galletas tienen una pinta de caseras, familiares, comestibles... que no pueden con ella. Pero con lo que me has matao es con tu invento de las glasas de color naturales, me parece genial y encima les queda bien a las condenadas.
ResponderEliminarUn beso muy fuerte
Esther
Enciendo esa vela contigo, que todo lo malo vaya pasando.
ResponderEliminarMe ha gustado la forma de darle color a la glasa.
Y tienes más razón que un santo, la cocina no entiende de aduanas, ni de fronteras, ni de nada de nada...........
Besos.
Hola Mai.
ResponderEliminarHoy especialmene me ha encantado tu entrada. Las galletas fabulosas y la glasa con colarante natural no tiene precio. Y como tú creo que es tiempo de encender velas, de pedir deseos, de desear todo lo bueno, de soñar, de ilusionar, de pensar y de querer, yo la encendería todo los días de mi vida. Y para terminar nos presentas esas fotos tan guapísimas. No se puede pedir más.
Un saludo.
Hola Patricia!
ResponderEliminarMuchas gracias. Ya verás que bonitas quedan en el árbol... no todas, claro, que la pancita reclama su ración:-P
Besos
hola Esther!
Está como loco el pobre;-) las varillas electricas también han "petado" de puro estrés así que todos estos kilos me los estoy merendando a mano.. pero con gusto no hay sarna.. o no pica que para el caso es lo mismo:-)
Besos
Hola Begoña!
Un beso muy grande guapa:-)
Besos
Hola Rosa!
Yo también. Cada día:-) Un fuerte abrazo,
Besos
A ver si a la tercera va la vencida, Mai es que me trastornas con tus textos y se me olvida la receta, me pasa siempre, jolines.
ResponderEliminarTe decía que me ha gustado mucho el post de hoy, lo encuentro dulce y lleno de amor.
Me ha gustado imaginarte horneando galletas y ya con la receta, me gusta mucho también como a ti decorar las galletas, pero así, con métodos caseritos y naturales.
Por aquí pronto empezará también el horno a tener su fuego, los pastelitos de navidad ya reclaman.
Un beso muy grande.
Maite, a mí también me chiflan las velas... Y esa última foto tuya me ha puesto la piel de gallina. Bueno, yo te mando muchísimos achuchones para que te entre subidón y alegría. Y si quieres también te mando el solecito que hemos tenido hoy por auqí.
ResponderEliminarLas fotos de las galletas me han encantado... qué bonitas!. Me están entrando unas ganas de hacer galletas...
Un besoteeeeeeeeee
Que ricas todas las galletas que nos presentas. Están todas para echarles el diente pero lo que me has dejado impactada es con lo de los colorantes naturales. Anda, menudo invento que nos has dicho!!! Y además quedan perfectas!!
ResponderEliminarBesitos
rosa
Tú haciendo kilos y kilos de GALLETAS, yo haciendo kilos y kilos de MICHELINES, por aquello de seguir recetas...
ResponderEliminarPero tu PROSA INIGUALABLE, me ha llegado y mucho.Puedo ver AUSTRIA con su PUREZA y MAJESTUOSIDAD, tal como la dejé el año pasado en mis vacaciones; puedo oler el aroma que sale de tu HORNO, y puedo sentir este sentimiento tuyo que expresas con tanta NATURALIDAD,
FELICES DÍAS PRE NAVIDEÑOS QUERIDA, FELIZ DÍA, Y FELIZ SEMANA para tí.!!! :)
Hola tronquita...me encanta cuando nos cuentas tradiciones del país donde vives...lo de las velas me acuerdo que el año pasado me lo comentaste y yo pensaba que era a partir del primer domingo de diciembre??? y ahora que??? ya no puedo encenderlas??? cachis que despiste...
ResponderEliminarlas galletas són tremendas, yo es que cuando veo estas galletas alucino porque por aquí no se hacen galletas así, no son típicas y claro me gustaría probarlas todas....
A mi también me ha gustado la última foto, tiene un no se que....
un achuchón....
Cómo echo de menos cuando llegan estas fechas escaparme a Alemania o Austria a disfrutar del ambiente pre-navideño. Solamente he ido dos veces, pero lo he pasado tan bien que me ha quedado una añoranza tremenda. y ahora, después de leerte aún tengo más ganas de irme para allá.
ResponderEliminarLas galleticas son preciosas!
Un besazo.
Es época de detenerse, de disfrutar y de recogimiento interior. Eso sí , antes estamos como locas horneando para cumplir con todos los pedidos y así como si nada después de entregar los pedidos pasamos al mayor placer que es disfrutar con los nuestros ese momento de paz.
ResponderEliminarAmiga de mi alma, mi vela estuvo unida a ti como las últimas veces, y esto, deseo que siga así por siempre.
Las galletitas de Majuluta son un éxito asegurado, no me extraña que no hayan quedado ni las migas, tienen un color aterciopelado que te deja pensando, como lo logrará esta chica, eh?
Besos y abrazos
Ay, Navidad! Estoy contentísima de que llegue su espíritu a mis blogs favoritos :) Encima horneando Mailänderli, una galleta que no falta jamás en mi casa, como buenos suizos, claro :) Mi padre es olerlas en el horno y se le enciende el chip de la nostalgia navideña, y ahora también me pasa a mí. Tu receta es algo diferente a la mía pero riquísima igualmente, seguro, tengo que probar el toque de ron :D
ResponderEliminarEspero que tu horno aguante el trajín de estas fechas!
Un abrazo
Hola Viena!
ResponderEliminarMuchas gracias:-) y sí, aunque no soy muy purista en esto de los adornos las glasas de colores artifiales me ponen un poco de los nervios. Luego me crean muchos remordimientos además de que neutraliza el sabor de las galletas. Siempre buscando como mejorar una masa de galletas para que luego sepa solo al azúcar de la glasa :-( un fiasco.. así, al contrario, de una galleta rica hacemos varios sabores, aromas y colores. Uhmmm... pues estaré atenta al olor de tu cocina:-)
Besos
Hola Laura!
¿Has visto que atardecer más lindo? son rosados y brillantes, muy requetelindos! Muchísimas gracias por todo lo que me mandas pero el solecico guárdalo para cuando no haya que de momento estamos requeteencantados con lo mucho que nos está acompañando:-)
Besos
Hola Piescu!
Buenoooo .. y con la mano que tú tienes para la estética de los postres no soy capaz de imaginar que cosas más bonicas serás capaz de hacer con estas glasas:-)
Besos
Hola Té de ternura!
jajajajaja! me cachis! la proxima intentaré que sea más ligera aunque también son de esas cosas que se agarran al michelín: tengo un pan pendiente y un queso de los mis experimentos así que o uno u otro cae. Feliz preambulo también para ti:-)
BEsos
Hola Núria!
No, el adviento siempre es el último domingo de noviembre y el calendario de adviento comienza el 1 de diciembre. Lo mismo el lío viene por ahí que con tanta cosa una ya no sabe;-P Y claro que puesdes encenderlas pero el domingo que viene 2:-) Muchos besos lindura,
+Besos
Hola Lola!
Pues aquí tienes tu casa, eso ya lo sabes. El marcadillo de navidad ya está puesto pero hace tanto calor (10ºC que teniendo en cuenta los pedazo de abrigos que llevamos pues se pasa mucho calor) que a nadie le apetece una bebida caliente así que no hay mucho ambiente aún... todo llegará:-)
Besos
Hola Erika!
jajajaja, así es:-) te has fijado en el reflejo de la vela en el cristal? parece que releja la llama doble y me dije "mira, qué cuca! cuánto sabe" :-) jajaja! pues lo hago barnizando la galleta con el huevo bastante diluido para que no las marque demasiado y nunca solo con la yema que le da un color mucho más intenso y se nota mucho el "maquillaje"... de todas formas, las dos primeras fotos son las de más fiar. En el resto la luz hizo de las suyas y las sacó como bien le dió a entender:-)
Besos
Hola Akane!
Creéme que deliciosas. Las recetas de Marcela no fallan nunca y las ajusta al máximo en azúcar, huevos y mantequilla. Y oye, nunca fallan:-) prueba y verás que toque más estupendo. Y ... uy no sé, ya lo que me falta si también casca que en estas semanas he tenido alguna que otra baja en mi cocina,
Besos
Por Dios Mai!! Me quedé helada! No había visto el reflejo doble ;-)
ResponderEliminarBesos
Qué bonitas palabras nos has escrito hoy, estas galletas me han encantado también, creo que las prepararé porque no parecen difíciles. Ya te contaré.
ResponderEliminarBesitos linda.
La verdad es que el tiempo nos está dando una tregua taaaaaaan buena que no apetece adviento ni Navidad, pero viendo esas galletitas estoy yo también por encender la velita :)
ResponderEliminarUn beso guapa!
Mai, es tan lindo y reconfortante... y como no, agradable leerte!!
ResponderEliminarYo también me quedo con la receta de las galletas de la Majuluta... Tendré que hacer algunas por Navidad, digo yo, no?
Un besote, guapísima y gracias por compartir!!!
IDania
Que buenas , me encantan estas galletas caseritas.
ResponderEliminarRecetas compartidas y con historia, esas son las que me gustan, sobre todo desde que te ando a la zaga. Tienes razón, las cosas ya no son tan fáciles. Ahora las entradas van dirigidas a, ponemos cara, voz y sentimientos al que está al otro lado aunque no le hayamos visto los ojos en vivo. Por eso cada vez creo más en la magia, si esto no lo es...
ResponderEliminarEn fin, que ya veo que vuelves a ser la reina del glaseado ;)
Un besazo reina!
Todavía tengo la vela que encendí por ti cuando Erika lo propuso, así que será la primera que encienda y además colgaré el calendario de adviento que le hice el año pasado a mi hijo.
ResponderEliminarCuanta historia detrás de cada receta y de cada persona y que poco nos paramos a pensar en ello. Me llevo tu reflexión y tus galletas, que estas parece que son de fácil pronunciación jejejejeje
Muchos besinos
No sabes cuanto bien me hace leerte eres capaz de pasar de una entrada chispeante que me hace reir a tocar el fondo de mi corazón y dejarme llorando pero con esas lágrimas que son un bálsamo y regeneran el alma.
ResponderEliminarBesicos sorianos:)
Me encantan tus entradas, y me encanta la cabecera del blog
ResponderEliminarGracias por compartir todas esas cosas con nosotros.
Eres mi nexo con el pueblecito que me acogió y que me vio madurar.
Un beso
Erika!
ResponderEliminaryo también, ya están nuestros reflejos juntos! qué bonita es la magia:-)
Muchos Besos
Hola toñi!
Muchas gracias guapa. Estas no son nada díficiles. Tienen una masa muy granta de manejar:-) Si las haces no dejes de contarme,
Besos
Hola Anita!
Claro que tienes que encenderla o correrás el riesgo de ser la única vienense en no hacerlo,
BEsos
Hola IDAnia!
Muchas gracias. Es siempre lindo tener una galleta cerca cuando el frío aprieta y los días son tan oscuros:-) nose, lo hacen más llevadero,
Besos
Hola Olga!
Muchas gracias guapísima:-)
Besos
Hola Charrita!
Que palabras tan bien dichas he disfrutado en tu blog. Porque si algo dejé sin decir tú lo has dejado claro cristalino y brillante:-) así da gusto tener un mano a mano con la palabra. Cuántos deberían de aprender! y la glasa, cómo olvidar esa primera vez, con esa mermelada de mandarina y vainilla que me llegó del legendario reino de castilla:-)
Muchos Besos
Hola Paxarina!
Sí? aún la tienes? ea, pues únete a nosotras y hagamos que el mundo caliente una chispica su alma que anda fría:-)
Besos
Hola Raquel!
Eso es bueno. La vida de locos que llevamos nos convierte un poco en trocicos de carne con ojos... así que tenemos que hacer este ejercicio de reir, llorar, sentir en mayúsculas para no olvidarnos de vivir como está manda'o. Con cariño, amor y mucho sentir:-) un fuerte abrazo mi querida soriana hacedora de cosas maravillosas que se te escapan del blog, mira lo que te digo, se escapan las lindezas como la leche al hervir:-P
Besos
Hola Rebeca!
Muchísimas gracias. Creo que has sido la primera el verla porque acabo de cambiar el diseño del blog. No me digas! bueno, cuéntame por favor, no dejes de escribirme y contarme tus historia, lo harás? díme que sí!
Besos
ciertamente nunca había conocido unas galletas más internacionales, son geniales ;)
ResponderEliminarSalu2, Paula
http://conlaszarpasenlamasa.cultura-libre.net
http://galletilandia.cultura-libre.net
Paula!
ResponderEliminarCómo estás?! Muchas gracias guapa!
Besos
Este es uno de los mejores blogs que he encontrado jamás de recetas. Tengo que felicitar a la Autora por el buen gusto y lo ingeniosas que son todas sus publicaciones.
ResponderEliminarSaludos y gracias!
Por casualidad encontré tu estupenda receta de galletas y me pareció tan sencillo de hacer que no me pude resistir a probarlo. Tan solo quisiera hacerte dos preguntas, la primera es cuánto tiempo hay que tener las galletas en el horno y la segunda es si hay que usar el grill para que queden doraditas.
ResponderEliminarYa es la segunda vez que las preparo pero no terminan de salirme bien, a la tercera va la vencida!
Muchas gracias.
Neus.
Hola Neus!
ResponderEliminarCada horno es un mundo! así que normalmente no pongo muchos detalles sobre estos seres tan especialitos... Mi consejo es que no le pongas grill, temperatura unos 180ºC. Eso sí, aunque no le enciendo el grill uso el programa de darle calor por arriba y por abajo. Tampoco me gusta hacerlas con el aire encendido ya que, aunque las dora mejor, suele secarlas mucho para mi gusto. y con la placa en el medio, mucho mejor. Yo las pongo más abajo incluso, pero esto en mi horno que es muy suyo. El tiempo depende. Es cuestión de ir mirando pero yo necesito entre 10-15 minutos. Si te gustan con más color, pincela las galletas solo con la yema de huevo y unas gotitas de leche.
Besos y espero que por fin salgan a ti gusto
Hola Maite.
ResponderEliminarSeguiré tus instrucciones y espero que el horno siga las mías, tienes mucha razón en decir que son muy suyos.
Quiero hacerlas para el día 6, las últimas que hice las terminé colgando de adorno, creo que me pasé con la harina...
Gracias por responder tan rápido!
Ya te comentaré el resultado.
Neus.
Uy, sí, cuidado con la harina porque están muy recortadas de mantequilla así que es fácil dejar la masa seca. El mundo harina es otro tema como el horno, muy suyo. Las harinas no absorben igual. aquí, por ejemplo, cambian mucho las moliendas dependiendo de donde compre la harina y cada una tira por su lado. Así que intento ser cauta dejando un poquito de harina reservada y en todo caso, la añado al final del amasado. Así que, si eso te pasa, puedes frotarte un poco de mantequilla en las manos y reamasar un poco más la masa. Otro truco que ya he usado y por cierto, me gusta mucho más que el de engrasar más la masa, es añadir una yema de huevo y la masa se rehidrata maravillosamente. Ya me contarás que tal
ResponderEliminarains, y un beso! qué voy y vengo como los toros, sin cortesías, y mira que siempre son tan bonitas. Un beso y gracias a ti por animarte a contarme las intimidades de tu horno. Me gusta mucho:-)
ResponderEliminar+Besos
Ya verás como al final la culpable de todo será la harina...jaja
ResponderEliminarPor suerte no es una tarea complicada esto de hacer galletas, solo es cuestión de tener buen ojo y que no falte la ilusión de probar cosas nuevas!
Otro beso para tí, guapa.
Neus.
He llegado desde "Estoy en ello" porque decía que te habías encargado de su diseño y me ha gustado muchísimo. También lo ha hecho tu blog así que enhorabuena. Y feliz año. Besotes
ResponderEliminarHola Maite, como ya te dije repetí la "operación galleta" con un resultado de aprobado satisfactorio. O bien mis invitados mienten de maravilla o yo tengo un paladar muy fino con la señora harina...
ResponderEliminarGracias a tu receta he experimentado una nueva faceta en la cocina que espero ir repitiendo.
Feliz año y besos!
Neus.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarPor cierto, ya soy seguidora de tu blog!
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